Chocos a la plancha

El choco es un molusco conocido también con el nombre de sepia, jibia o cachón.
Es una de las especies más limpias que se pueden encontrar, ya que según un estudio, presenta los niveles más bajos de contaminantes en su cuerpo.
Este cefalópodo se puede encontrar en los mercados a lo largo de todo el año, produciéndose la mayoría de las capturas en los meses fríos.
Por lo general se comercializa fresco y en menor medida congelado. A la hora de hacernos con él tenemos que prestar atención a la apariencia y consistencia de su carne. Esta tiene que mostrarse brillante, firme, húmeda y suave al tacto.

RECETA SUGERIDA
La noche anterior a cocinar el choco picamos los dientes de ajo muy pequeños y los ponemos encima de los chocos por ambas caras, junto con el perejil picado, sal y unas gotitas de aceite.
En el momento de hacer los ponemos a la plancha con fuego suave para que se hagan poco a poco, y se forme una salsita con el agua de los chocos, junto con el ajo y el perejil.
Servimos al momento y a disfrutar de tan rico manjar.

INFORMACIÓN NUTRICIONAL
En cuanto a sus propiedades nutritivas hay que señalar que el choco es un estupendo alimento. Su composición es muy parecida a la del calamar aunque con niveles mucho más bajos de colesterol.
La carne del choco es rica en proteínas de alto valor biológico que junto al agua y las grasas son los nutrientes que más abundan
Las vitaminas que podemos encontrar son la B3, la B12 y D.
El fósforo, potasio, magnesio, calcio y hierro son los minerales más importantes que podemos encontrar.